Ing. Rodrigo Nieto
A raíz de los accidentes reiterados en la rambla de Montevideo en el tramo entre las calles Araucana y 6 de Abril, se intenta en este informe identificar las posibles causas que los provocaron.
El diseño de una calle o una ruta comienza con la clasificación funcional de la misma, esto es cual es la función que va a cumplir, que puede ser de movilidad o de acceso. Esto quiere decir que, si la función es la de movilidad, el objetivo es lograr que la mayor cantidad de vehículos se desplacen de la manera más ágil posible.
En el caso de la rambla de Montevideo se presentan varios usos, uno de ellos es el de movilidad ya que es una de las alternativas de llegada a la ciudad desde el Este, y por otro lado cumple la función de paseo y recreación.
A partir de la clasificación de la vía se define la velocidad de diseño que condicionará la geometría a construir, esto es los radios de curva, acordamientos verticales, peraltes, señalización, etc. Por ejemplo, de acuerdo a datos obtenidos del manual “A Policy on Geometric Design of Highways and
Streets – AASHTO”):
Se indica una velocidad de diseño, y, para un peralte seleccionado (a favor de la curva) se obtiene un radio mínimo para las curvas.
El peralte en las curvas (pendiente transversal en las curvas) se calcula entonces considerando la velocidad de diseño de la ruta o calle y del radio de la curva. Esa inclinación de la calzada colabora en conjunto con la adherencia de los neumáticos con la maniobra de giro. Si la velocidad de diseño no es alta, el peralte puede ser contrario a la curva utilizando la adherencia calzada-neumático para lograr el cambio de dirección. A mayor velocidad, mayor debería ser la pendiente transversal.
La combinación peralte fricción lateral se define de forma tal que para la velocidad de diseño no haya riesgo de perdida de adherencia de los neumáticos considerando un rango amplio de condiciones climáticas y de estado de conservación de los neumáticos, así como la sensación de confort en la circulación (inclinación del vehículo a recorrer la curva).
Todo esto es para pavimentos en buenas condiciones de circulación, si se tiene un pavimento con pozos, deformaciones, etc., esto introduce cambios dinámicos en la trayectoria de los vehículos que empeoran la situación.
Para analizar la geometría del lugar se utilizó una foto aérea, obtenida del sitio IDEUY. Estas fotos tienen información que permiten obtener medidas ajustadas utilizando herramientas adecuadas.
Del análisis de la curva en cuestión se observa que su desarrollo se compone de tres tramos, con radios distintos:
Esto provoca que los conductores que circulan por la rambla, una vez comienzan a recorrer la curva, se encuentran con un cambio de curvatura, con un radio más chico. Esto obliga a cambios en el giro del volante que, en condiciones de circulación más comprometidas como días de lluvia, puede provocar la pérdida del control del vehículo.
Si se analiza la sección transversal de la curva, se observa que la calzada tiene pendiente hacia ambos lados desde el eje.
En la curva donde se dieron los accidentes, el peralte es contrario a la curva. Esto, combinado con la geometría horizontal (radio) hace que se exija más a los neumáticos para lograr circular por la curva por encima de los valores recomendados.
Los dos accidentes fatales que se dieron fueron en días de lluvia (la adherencia del neumático con el pavimento es menor).
Adicionalmente a los conceptos anteriores, el cordón de la rambla es alto para funcionar como cordón pisable, al pasar por sobre ese cordón el conductor puede perder el control del auto, pero a su vez es un cordón muy bajo como para redirigir un vehículo sin control.
En resumen, el primer problema es definir cuál es la función de la rambla (acceso a Montevideo rápido o paseo) y con eso definir la velocidad de circulación. A partir de eso definir la geometría necesaria (revisar peraltes, estado de pavimento, necesidad de barreras, etc.).
Por supuesto la responsabilidad no es únicamente de la infraestructura, los conductores deben tener el criterio de aumentar la precauciones en días de lluvia. el uso de celular también puede incidir.
Controlar la velocidad es una solución provisoria (regular la velocidad a la velocidad de diseño) hasta definir cuál es la función de la rambla. hoy cumple las dos funciones, y por eso tenemos vehículos circulando a alta velocidad, en calzada diseñada para baja velocidad. la buena adherencia de los neumáticos nuevos, los vehículos modernos etc. disimulan el diseño antiguo en días normales, cuando llueve las cosas cambian.
Todas las reducciones de velocidad que se introduzcan en una via de movilidad como es hoy la rambla provocarán demoras en los tiempos de circulación y menor cantidad de vehículos que puedan desplazarse por la via.
Llevar la rambla a una velocidad de diseño mayor, implicará no solamente cambiar el peralte de esta curva en cuestión, sino también ampliar los anchos de carriles, aumentar radios de curva, etc. hay que revisar toda la geometría del corredor y por supuesto mejorar las condiciones del pavimento.