Escribe Manuel Da Fonte
La señalización en un sistema vial inseguro y riesgoso, no evitará la reiteración de siniestros, simplemente hará más fácil encontrar culpables, librando a la autoridad de su responsabilidad en exponer a los usuarios a tan alto riesgo.
Si la señalización además es errónea e inadecuada, mucho menos aún.
Recientemente publicamos un artículo señalando el extremadamente riesgoso diseño vial del cruce de la ciclovía frente al Hospital de Clínicas, colocado en el ingreso a la bahía de giro a la izquierda hacia Escuder Nuñez.
Ciclovía frente al Hospital de Clínicas, mayor riesgo imposible
El cruce es muy riesgoso debido a que se coloca el cruce de la ciclovía en el ingreso a una bahía de giro a la izquierda.
Las bahías de giro o sendas de desaceleración tienen la función de permitir el frenado y la detención de los vehículos, apartándose de las sendas de circulación de la avenida o la ruta en cuestión, antes de que realicen el giro, ya sea a la derecha o a la izquierda.
El cruce de la vía hacia la cual se gira, de los peatones o ciclistas, siempre está al final de la bahía de giro o senda de desaceleración. Nunca antes al inicio de la bahía.
Así era dicha bahía de giro, antes de las modificaciones introducidas por las obras del túnel de av. Italia. Como pueden observar, no existía ningún cruce ni interferencia en el ingreso a la senda de desaceleración, y el cruce estaba al final de la misma.
Colocar un cruce al inicio de la bahía de giro, como se hizo frente al Hospital de Clínicas, genera una situación imprevista para el automovilista, más bien anómala, dado que nadie espera un cruce en el ingreso a la senda de giro, lo obliga a detenerse sobre la senda de circulación rápida de av. Italia, no le da tiempo a desacelerar y detenerse sin hacerlo bruscamente, y no puede visualizar fácilmente a los ciclistas que vienen en su mismo sentido, ya que debe girar su cabeza 180 grados para verlos.
Todos estos factores de riesgo son fácilmente evitables, si la ciclovía sigue paralela a la bahía de giro por su lado izquierdo, y el cruce se realiza en la esquina con Escuder Nuñez, al final de la bahía de giro.
Frente a esta situación denunciada en nuestro artículo anterior, la Intendencia de Montevideo decidió colocar un cartel vertical de CEDA EL PASO en el ingreso a la bahía de giro, justo antes de la ciclovía.
Como pueden comparar con las fotos de la semana pasada, el cartel de Ceda el Paso vertical no existía.
Esta medida, no solo no evita ninguno de los riesgos señalados, sino que además no es correcta, por qué la mayoría de los conductores interpretará que se trata de una señal de ceda el paso para los automóviles, en un cruce automotriz inexistente.
Además desde el semáforo de cruce frente al Hospital de Clínicas, justo antes del ingreso a la bahía de giro, no se ve el cartel de Ceda el Paso, ni es posible percibir el cruce de la ciclovía, colocada en el ingreso a la misma.
El aviso, con anticipación debería ser el que mostramos en el artículo anterior, y que debe colocarse a una distancia prudente del cruce, además de uno sobre la ciclovía mismo.
Como dijimos al principio, señalizar un cruce de diseño equivocado y riesgoso, no lo hace más seguro, ni elimina los riesgos a los cuales se expone a automovilistas y ciclistas.
Simplemente permite encontrar culpables en forma más fácil, mientras las autoridades eluden sus responsabilidades, que consisten en ofrecer un sistema más seguro a los usuarios, que no ponga en riesgo sus vidas.