Finalmente se llegó a acuerdo, y las anunciadas medidas de fuerza que iban a ser tomadas por los controladores aéreos fueron dejadas sin efecto, por lo que la operativa de los Aeropuertos nacionales será totalmente normal en la próxima semana de Turismo.
Esto constituye una importante noticia para todos los operadores turísticos nacionales, en tanto los atrasos eventuales que podían haber llegado a producirse incidían directamente en las operaciones de interconectividad, afectando así el desarrollo normal de los desplazamientos en la regían, cosa muy preocupante en vísperas de un importante movimiento turístico.
Como informara Contraviento, el conflicto respondía a cuestiones burocráticas de forma, en tanto no existían discrepancias importantes de fondo entre los trabajadores y el Estado, por lo que era esperable el llevar el tema a buen puerto.
O mejor dicho, a buenas pistas.