
La proliferación de subsidios y sanciones señala el desmoronamiento del “orden internacional basado en reglas”. Instituciones como la OMC, creadas para eliminar barreras comerciales y fomentar la inversión, ahora enfrentan obstáculos crecientes a medida que las reglas se desintegran. Esta regresión, conocida como desglobalización, ya es visible en los datos económicos, afectando el precio de los activos y redirigiendo el capital en un mundo menos integrado. Aunque aún no ha impactado significativamente los niveles de vida globales, la apuesta de que las reducciones de pobreza logradas por la globalización puedan continuar sin ella es alarmante.
Puntos Importantes:
Retroceso del Comercio y la Inversión:
Después de la Segunda Guerra Mundial, muchos países impusieron aranceles para desarrollar industrias nacionales. Con el fin de la Guerra Fría, se promovió la integración económica. Los aranceles cayeron y se abolieron controles de capital, permitiendo a las empresas operar globalmente con mayor libertad. Sin embargo, el reciente sabotaje de Estados Unidos al mecanismo de resolución de disputas de la OMC y la proliferación de sanciones comerciales indican un retroceso en estos avances.

Medidas Económicas Punitivas:
Las sanciones comerciales y económicas han aumentado significativamente, especialmente en respuesta a conflictos como la invasión de Ucrania por parte de Rusia. Estados Unidos ha impuesto restricciones a China para frenar sus ambiciones tecnológicas. Además, los gobiernos están revisando y, a menudo, bloqueando inversiones extranjeras en sectores estratégicos, como la tecnología y los recursos naturales.
Resurgimiento de la Política Industrial:
La política industrial está en auge, con gobiernos de todo el mundo implementando más de 1.500 políticas para promover industrias específicas en 2021 y 2022. Estados Unidos, Europa, India y Australia están canalizando miles de millones de dólares en subsidios para fortalecer cadenas de suministro nacionales
Decadencia de Instituciones Globales:
Instituciones como el FMI y la OMC, que alguna vez tuvieron un papel central en la economía global, están perdiendo su influencia. El FMI enfrenta dificultades para resolver crisis de deuda debido a la aparición de nuevos acreedores como China e India. La OMC, por su parte, ha visto colapsar sus negociaciones y su capacidad de resolución de disputas, lo que ha permitido a los gobiernos adoptar políticas comerciales arbitrarias.
Impacto en el Comercio y la Inversión:
La incertidumbre económica y la desglobalización han frenado el comercio mundial de bienes y servicios, y la inversión transfronteriza está disminuyendo. Empresas y bancos occidentales se están retirando de mercados como China, mientras que la proporción de ganancias corporativas provenientes del extranjero está cayendo.
Efectos en la Pobreza y la Desigualdad:
La globalización redujo drásticamente la pobreza global, especialmente en países como China. Sin embargo, la desglobalización presenta un riesgo significativo para los pobres del mundo, ya que puede ralentizar el crecimiento económico y aumentar la desigualdad.
Compromiso Político con la Desglobalización:
Líderes mundiales como Narendra Modi en India y potencialmente Donald Trump en Estados Unidos están promoviendo políticas de desglobalización. Estas políticas incluyen grandes inversiones en manufactura nacional y posibles aranceles elevados, lo que podría intensificar las tensiones económicas globales.
El Rol de la Política y el Populismo en el Proteccionismo
La política y el populismo juegan roles cruciales en el surgimiento del proteccionismo y la desglobalización:
Política Populista:
Los líderes populistas capitalizan el descontento económico y social provocado por la globalización. Prometen proteger los empleos nacionales y revitalizar las industrias locales a través de políticas proteccionistas. Estas promesas suelen incluir aranceles elevados, subsidios a industrias nacionales y restricciones a la inversión extranjera. El populismo, con su enfoque en soluciones rápidas y visibles, a menudo promueve medidas proteccionistas que pueden ser perjudiciales a largo plazo pero populares a corto plazo.
Nacionalismo Económico:
La política populista frecuentemente se entrelaza con el nacionalismo económico, donde se prioriza la autosuficiencia nacional sobre la cooperación internacional. Líderes como Donald Trump en Estados Unidos y Narendra Modi en India han adoptado políticas que buscan reducir la dependencia de las importaciones y fortalecer la producción nacional, apelando al orgullo nacional y a la autodependencia económica.
Respuesta a Desigualdades y Crisis:
La política proteccionista también se ve alimentada por las desigualdades económicas y las crisis. La pandemia de COVID-19 y las tensiones geopolíticas han expuesto las vulnerabilidades de las cadenas de suministro globales, llevando a los gobiernos a reconsiderar sus estrategias económicas. Los políticos, respondiendo a las preocupaciones de sus electores, adoptan medidas para proteger las economías nacionales y evitar futuras dependencias críticas de otros países.
Influencia en la Política Industrial:
El populismo también impulsa la política industrial, donde los gobiernos invierten en industrias específicas para crear empleos y promover el desarrollo económico local. Estas políticas son populares entre los votantes, ya que prometen beneficios tangibles, como empleos en sectores estratégicos y el desarrollo de tecnologías avanzadas.
Conclusión:
La desglobalización, impulsada por una combinación de políticas proteccionistas y populistas, está reconfigurando el orden económico mundial. Si bien estas políticas pueden ofrecer beneficios a corto plazo y apelar a los sentimientos nacionales, presentan riesgos significativos para la estabilidad económica global y el progreso en la reducción de la pobreza y la desigualdad. El desafío será encontrar un equilibrio que permita aprovechar los beneficios de la globalización mientras se fortalecen las economías locales y se mitigan las vulnerabilidades expuestas por las crisis recientes.