Por Silvio Moreira
Murió Tina Turner, la extraordinaria cantante que cargó siempre con la admiración que despertaban sus piernas, lo que quizás dejó relegados otros aspectos de su personalidad artística.
Sin parecer ni intentar ser modernoso, estimo que Tina fue desde sus comienzos muchísimo más que la dueña de unas piernas envidiables por hombres y mujeres. Mi pasión por ella, por ejemplo, está asociada a otras cosas muy distintas.
Creo que fue en 1975 -año de su estreno mundial- que también llegó a Montevideo la película Tommy, dirigida por Ken Russell y basada en la ópera rock homónima creada casi en su totalidad por el genio de Pete Townshend.
No diré nada acerca de esta perla cinematográfica y musical, pero es imprescindible mencionar que en la trama aparecen personajes increíbles interpretados por gente que ya era famosa en ese momento, como Elton John, Eric Clapton y Tina Turner, actuando en una escena absolutamente onírica y desopilante poniendo su piel y su voz para encarnar a la Reina del Ácido, una suerte de prostituta y sacerdotisa que tendrá una importancia fundamental en el destino del protagonista de la película. Ver esos nueve minutos icónicos atornillado a la butaca, mientras los frenéticos toques del bajo me golpeaban el alma, selló un pacto de amor y devoción con esa mujer que estaba allí en la pantalla. Yo tenía 15 años.
Una voz inigualable
Si hablamos de su periplo por la vida, fue una legendaria cantante, compositora y actriz estadounidense, conocida por su inigualable voz, su enérgica presencia en el escenario y su historia de superación personal. A lo largo de su carrera, compartió siempre valiosas reflexiones en entrevistas, revelando detalles sobre su vida, su música y su fortaleza interior, ya que desde su icónico devenir en pareja del músico Ike Turner, su vida también fue un infierno del cual pudo escapar para brillar con destellos propios.
Nació el 26 de noviembre de 1939 como Anna Mae Bullock en Nutbush, Tennessee. Rememorando su primera juventud, en una entrevista dijo: «Nací cantando. Siempre supe que estaba destinada a ser una cantante».
En 1958, tan solo con 19 años Anna Mae conoce a Ike Turner y se une a su banda, The Kings of Rhythm. Dijo Tina: «Ike vio algo en mí que nadie más vio. Me dio la oportunidad de brillar en el escenario».
Si bien Ike encontró la joya para pulir, no la pulió precisamente con cariño, ya que empezaron años de sufrimiento y desprecio constantes, hasta que en 1971 Tina se separa de Ike Turner debido a abusos físicos y emocionales.
«La decisión de dejar a Ike fue lo más difícil que tuve que hacer, pero sabía que tenía que hacerlo por mi propia supervivencia». – comentó años después-.
Comenzaron años de trabajo intenso y colaboraciones, con una Tina intentando despegarse de su antigua etiqueta como pareja de Ike, hasta que el primer gran impacto solista llega de la mano del lanzamiento del álbum «Private Dancer» en 1984, que incluía los éxitos «What’s Love Got to Do with It» y «Private Dancer».
«Para mí, ‘Private Dancer’ fue un renacimiento. Fue el comienzo de una nueva etapa en mi vida y mi carrera». – comentó Tina Turner en una entrevista de 1990.
La gira de 1993
Ya consagrada, para 1993 lanza el álbum «What’s Love Got to Do with It» y se embarca en una exitosa gira mundial. En plena gira, en una entrevista para la cadena CBS confesó: «La música me salvó. Me dio fuerza y me permitió sanar. Y compartir mi música con el mundo es un regalo inmenso».
Su público y el gran público mundial pudieron comprender cabalmente cómo había sido su camino, cuánto su suplicio y qué gigantesca su capacidad de resiliencia cuando Tina se animó a escribir en el año 2000 su autobiografía: «I, Tina», revelando detalles impactantes de su vida. «Escribir mi autobiografía fue liberador. Pude enfrentar mi pasado y usar mi historia para inspirar a otros a encontrar su propia fuerza interior». – dijo Tina en el lanzamiento del libro.
Cumplió con una pausa en su carrera hasta el año 2008, cuando apareció fugazmente en una gala de los premios Grammy y también participó en un disco de Herbie Hancock. Sin embargo, a finales de ese año cargó nuevamente sus baterías y con casi 70 años encima retomó las giras y presentaciones durante un año.
El retiro
En el 2009 Tina anunció su retiro de los escenarios luego de su última gira, «Tina!: 50th Anniversary Tour». «Mi legado no se trata solo de la música, sino de mi determinación de superar las adversidades y vivir una vida auténtica. Eso es lo que espero que la gente recuerde». – afirmó.
En 2013 puso fin a su carrera y se retiró del mundo del espectáculo, renunció a su ciudadanía norteamericana y se fue a vivir a Suiza, donde falleció a los 83 años, el 24 de mayo.
Tina Turner ha dejado una huella imborrable en la industria de la música, no solo por su talento incomparable, sino también por su capacidad de enfrentar desafíos con valentía y convertirse en un símbolo de fortaleza y resiliencia. Sus respuestas que citamos en entrevistas revelan su espíritu indomable y su inspiración para superar obstáculos, dejando un legado de empoderamiento y autenticidad para generaciones venideras.