
“Que la pelota no se manche” dijo Maradona y yo quiero parafrasearla pensando en don Pepe.
La búsqueda desesperada de voto extrapartidario lleva a pícaros “contratistas” a ir a buscar batllistas desencantados para engrosar sectores de izquierda. Básicamente el tradicional transfuguismo en el que políticos como Orsi se mueven como pez en el agua. Ya lo han hecho también con gente del PN en alguna ocasión que precisaron votos para un fideicomiso, y no tendrán empacho en venir por ellos si encuentran un argumento válido que justifique ese transfuguismo. Para prevenir estas fugas bueno es reforzar conceptos en lo ideológico y reforzar nuestras identidades.
Es imperioso pues distinguir IDEOLOGIA Y POLÍTICA
Cómo las diferencio?
Las dos se nutren de un tronco común de ideas básicas, hasta doctrinas filosóficas, pero difieren en consideraciones de tiempo y espacio y de la lógica orteguiana de “Yo y mi circunstancia ”.
Eso mismo le sucede a los hombres y partidos en la política.
Al Batllismo le ha pasado eso. Cuando lo quisieron convertir en dogma lo desvirtuaron .
La ideología sin política y sus sinceramientos con el mundo que se vive sucumben irremediablemente ante la tozudez de la realidad.
También digo que la política sin una ideología básica que frene los apetitos y tentaciones del dirigente terminan por vaciar de contenido y límites al abuso del poder. Bueno es guardar equilibrios.
El Dr. Jorge Batlle se dio cuenta a tiempo del problema del Batllismo de los batllistas y quiso aggiornar esa raíz de principios, adaptándolo a las exigencias de un mundo que ya no era el del primer tercio del siglo XX.
Fue muy resistido y con mucha pena digo que cuando tuvo el timón del país, un maremoto de crisis y pestes le devoró buena parte de sus sueños originales. Y el Partido Colorado (hogar natural del batllismo) pagó un alto precio de miles y miles de votantes que encontraron en otras tiendas, ofertas electorales que les sonaron parecidas a su ideario.
Falsas percepciones sin dudas. Reconozco que había en ese Frente Amplio de hace 25 años referentes que podrían ser catalogados como socialdemócratas y con algún apego a entender al menos las reglas básicas del mercado. Tenían su peso dentro del FA. Los 15 años de gobierno les sirvieron para diluirse por completo dentro de esa Coalición. Hoy casi no existen o carecen de relevancia en la interna.
A ellos la Política les devoró la ideología. El marxkeynesianismo en permanente tensión dialéctica más un combo de Astori/Pepe/ Sendic dieron por tierra cualquier utopía soñada.
Jorge Batlle lo anticipó antes de su partida: ” El FA va a perder porque la crisis los hará fracasar y no por la ideología”.
Yo agregaría -sin ánimo de enmendar la plana- que también una ideología que diagnostica mal y se ejecuta peor lleva irremediablemente a las crisis. Y el FA claramente fracasó.
Y esa derrota fue aprovechada luego por los grupos más radicales para consolidar su poder en la interna. Y peor aún. Instalaron al Pitcnt dentro del FA. En el marco de su proceso autocrítico triunfó la visión que les faltó más “zurda”. En fin…yo los dejaría insistir con esa idea. Bien dicen que cuando veas a tu adversario equivocarse..no los interrumpas.
Y es por eso que digo una y mil veces que adentro de ese FA PITCNT no existe espacio alguno para un batllista. Podrá haber alguno que se autopercibe como tal pero en el FA no hay batllismo.
Porque no hay ideología que se le parezca (con algo de poder específico adentro). Y porque la praxis política que los lleva a aliarse con cuanta dictadura progre haya no es compatible con el ideario y las afinidades o simpatías del batllismo durante su historia.
El batllismo no es dogma. Es acción y reformismo. Revaloriza principios liberales y no colectivistas. Reniega de la lucha de clases desde siempre y busca la solidaridad social en los objetivos perseguidos y no en un mero discurso distributivo y asistencialista para regocijo de ongs compañeras. Las respuestas estatistas de principios de siglo XX fueron una reacción a coyunturas de entonces e inspiradas de manera confesa por Eduardo Acevedo y Martin C Martinez (*) en una búsqueda de alivio al contribuyente. Si resucitara Batlle y Ordoñez y viera que hay gente que hoy 120 años después quiere reivindicar las mismas recetas, los demandaría por reaccionarios. Batlle en el acierto o error nos obliga a entender el tiempo que vivimos. Cohabitar con comunistas y tupamaros y definirse batllista es jugar a ser Marty McFly disfrazado de “Enrique el antiguo”.
Digo un poco más. No sé si hay batllismo en el Partido Colorado. (Supongo que habrá pero solo supongo). Pero estoy seguro que fuera de él..NO existe.
(*) Ministros responsables de temas de Hacienda en gobiernos de Batlle y Ordoñez