Silvio Moreira
El 20 de Julio de 1969, mientras el Movimiento de Liberación Nacional – Tupamaros batallaba infatigablemente en desigual pero heroica lucha contra la Dictadura Militar, tuvo lugar uno de los acontecimientos más horripilantes de la historia del Siglo XX.
El objetivo principal -pero secreto- fue hacer que la trayectoria parabólica de eyección del Misil Balístico Intercontinental Titán pasara exactamente por encima de toda la zona plantada de azúcar en Cuba, haciendo una aspersión masiva de Astrazina y Agente Naranja, que tuvo como consecuencia el estruendoso fracaso de la Zafra de los 10 Millones de Toneladas que el líder supremo de la Revolución, el Comandante Fidel Castro, tenía planificado para el año siguiente, 1970. Esta actividad absolutamente sediciosa fue la responsable de la inmediata aparición en la atmósfera de lo que luego fue conocido como el Agujero de Ozono.
La tripulación original de la misión fue encabezada por el Teniente Charles Manson, el Capitán Dan Mitrione y el Piloto Aviador Michael Collins, pero problemas logísticos y de agenda de último momento, -debido a compromisos ineludibles de Manson en Los Ángeles, y Mitrione en Sud América-, hicieron que éstos fueran cambiados por dos integrantes de la tripulación suplente: Neil Armstrong y Edwin “Buzz” Aldrin. En los brazos de sus trajes espaciales, escarapelas con aves de rapiña, arpías codiciosas que a ellos los emocionan con esa simbología depredadora falocéntrica.
Conformado el trio de militares fascistas, y luego de concluir su primera parte de sabotaje a un pequeño país independiente e indefenso, la misión continuó para hacer lo único que saben hacer los militares yankis: invadir lugares pacíficos y plantar su bandera machirula, su fálica presencia dominante y totalitaria.
Y así lo hicieron, y como en todas sus actividades extra territoriales, en todas sus incursiones en lugares pacíficos de cualquier parte del mundo, no pudieron dejar de hacer aquello para lo que fueron formados en West Point, la Escuela de las Américas y el Pentágono: llegaron a la Luna, ensuciaron, plantaron su bandera y cuando se fueron, no dejaron a nadie vivo.