Juan R. Rodríguez Puppo
Las fuerzas en pugna suponen competencia por una supremacía. Sucede en el comercio mundial o del barrio. En el deporte, la vida de las personas y también en política.
Las elecciones nacionales son una competencia por obtener el voto de los ciudadanos. Las fuerzas en pugna tienen ventajas y debilidades conforme sus características y temperamentos. Así nos lo enseñó Michael Porter alguna vez allá por 1980 cuando introdujo este concepto al analizar fortalezas y debilidades de empresas. Eso obviamente migró hacia el marketing político.
¿Dónde somos fuertes o débiles?
La Coalición Republicana tiene ostensibles ventajas competitivas. Por ejemplo: Su conducción en la política económica.
Por más que el Ec. Oddone haya desbarrancado en estos días buscando empatizar con la “pesada” del FA e intentando minimizar la figura de la Ec. Arbeleche; su crítica pasará al olvido porque la gente en Uruguay no es tonta y valora los logros y el temple de una brillante ministra.
Es ventaja competitiva de este gobierno y potenciará el voto hacia la Coalición. No es la única. Su debilidad hoy es el desgaste con episodios que destiñen su gestión. Algunos referidos a corrupción en gobiernos municipales otros vinculados al entorno de figuras de gobierno. Todo eso explotado y potenciado por una oposición que busca “tirar el chico lejos” de los actos de corrupción durante gobiernos frentistas.
La real ventaja competitiva de la izquierda en Uruguay sigue siendo el RELATO. Los DATOS los defiende el Oficialismo. El Relato es hoy la mejor herramienta de la oposición. Construir la idea de una dualidad diabólica en la que los “HONESTOS” están al lado de Yamandú y la corrupción en la vereda opuesta es la estrategia de marketing de la oposición.
La desventaja competitiva de la Coalición es que en octubre debe defender su gestión y ya quedaron lejos Sendic, Calloia o Gas Sayago. Y debe enfrentar sus datos al relato de un FA que hoy se parece mucho a Baak. Esa criatura mitológica hindú que supo ser un animal maléfico alguna vez y ahora se convirtió en una figura humana que se acerca a sus semejantes para luego redimirse y convertirse un día en fierecilla y atacar sus congéneres. El FA suena a Baak para mí.
Que me perdone el lector opositor, pero no compro el “buenismo” de nadie en política. Y menos de los que estuvieron 15 años consecutivos en el poder y mostraron la hilacha. Aun así, tienen legítimo derecho a señalar los errores del gobierno de Coalición.
Otra ventaja competitiva de la oposición es aprovechar la polea de trasmisión de valores de izquierda que en Uruguay está muy aceitada. Desde los medios masivos a la cultura y pasando por un ex fiscal de Corte funcional. También allí el manejo astuto del relato constituye un arma muy poderosa. Se aprovecha cada circunstancia. Por citar un ejemplo: se despidió de un informativo una reconocida periodista con muchos años de actuación. Entiendo y comparto que se destaque esa trayectoria porque lo merece. Pero ya pasa a ser parte del relato frentista el exceso en ríos de tinta y horas de cobertura mediática de alguien que todos ya sospechamos tendrá un pronto reciclaje en la política partidaria. Sólo la izquierda uruguaya y sus tentáculos de poder puede organizar una cobertura de honores a una informativista afín, qué serían la envidia del propio Paul Mac Cartney el día que decida dejar de cantar. También eso es Relato. Y ventaja competitiva
Por tanto ¿Qué le queda a la Coalición como herramienta?
Destruir relatos no es sencillo. Pero además de los datos de inflación, salario, empleo, covid 19, riesgo país, hay buenos argumentos para defender un nuevo tiempo “multicolor”.
Por citar alguno: la diversidad de sus partidos. Da amplitud y fortalezas en programas y cuadros políticos. Su lejanía de las tiranías continentales.
Los candidatos y las fórmulas casi sin excepción están mejor preparadas para los debates. Y aunque estos no sean aceptados el ciudadano promedio se da cuenta que el dueto frentista no resiste un debate en serio con ninguna de las fórmulas de la Coalición. Ventaja competitiva de la Coalición es alentar a Pacha Sánchez que siga hablando de la huelga de hambre de las vacas en verano o Cosse pensando que los caballos en campaña son tratados como mascotas hogareñas.
En resumen. Queda ya menos tiempo y los equipos se refuerzan como en los periodos de pases en el futbol. La llegada de Pedro al PC es también una ventaja competitiva. Vuelve sin desgaste previo y si bien parece “no pescar” en el pecera de centro refuerza posiciones. El FA va a recibir el cimbronazo en las encuestas porque venía cotizando al alza y se desayunarán que ni la critica a Ripoll ni el efecto “Caram” dio el resultado esperado. Los votos migran en todo caso dentro de las fronteras de la Coalición Republicana de un lado al otro. La encuesta de FACTUM de estas últimas horas fue un golpazo que será prontamente respondido con alguna noticia de “impacto”. La Coalición según esta encuesta suma 5 puntos más que el FA y hasta parece un escenario lógico que el voto en el Uruguay siga estando muy repartido entre bloques.
Final de bandera verde nos espera. ¡No rompan los boletos!