La jueza María Basán no hizo lugar a la medida cautelar que solicitaron los propietarios para abrir el local esta temporada. Éstos presentarán una demanda civil contra la Intendencia de Rocha que se calcula superará el medio millón de dólares.
Luego que la justicia fallara a favor de la Intendencia de Rocha impidiendo al boliche Alma abriera para realizar el baile en La Pedrera la polémica entre los dueños de Alma y el intendente Alejo Umpiérrez, quien desde el primer momento había alegado que no podían operar en esa zona a raíz de la queja de los vecinos llegó a su fin.
El intendente argumentó que para que el boliche funcionara no estaban “dadas las garantías” debido a que no tenían las habilitaciones correspondientes, algo que la defensa de los dueños de Alma aseguró que sí.
Los empresarios preveían abrir este verano sobre la ruta 10 cerca de La Pedrera, habiendo vendido ya a miles de jóvenes entradas VIP para esta temporada.
Al margen de la decisión judicial, el tiempo perdido impide abrir ya que se perdieron la mejor parte de la temporada al estar cerrados durante los primeros días de 2023.
El intendente Umpiérrez, había firmado la resolución que inhabilitaba al boliche no en ese lugar. Posteriormente un Tribunal de Apelaciones falló a favor de los propietarios y les dio la derecha para operar allí. Es así como vendieron casi 3.000 entradas. La Intendencia por decreto prohibió la apertura del establecimiento.
Con el objetivo de recuperar el dinero invertido los empresarios reclaman a la comuna una cifra que supera los U$S 500.000, cifra que los propietarios a la hora de emprender la instancia judicial consideran como pérdida por ventas de entradas y la inversión realizada en infraestructura y otros insumos.