Un asteroide del tamaño de un minibus pasó durante la noche del jueves por la punta más sureña de la Patagonia, en un recorrido que estuvo más cerca que la órbita de algunos satélites en el planeta tierra. A pesar de su gran tamaño, fue descubierto recién la semana pasada por Fannaidy Borisov, un astrónomo amateur que opera desde Crimea, el territorio ucraniano ocupado por Rusia desde 2014.
Se trata de uno de los acercamientos más extremos desde que se tiene registro.
Los científicos estaban seguros de que esta roca no iba a impactar contra el planeta, pero incluso, en caso de que ocurrieran, no temían que tenga gran impacto en la tierra, debido a que se hubiera desintegrado en la atmósfera en una espectacular bola de fuego, porque mide entre 3.5 a 8.5 metros de largo. En comparación, el asteroide Chelyabinsk que entró en el planeta durante el 2013 medía 20 metros de largo y, cuando impactó, generó una ola de sonido que destrozó ventanas en las regiones aledañas.
“Nuestro equipo descubrió rápidamente que el asteroide BU no era uno que fuera a impactar; pero, a pesar de las pocas observaciones que realizamos, pudimos deducir que pasará extraordinariamente cerca de la tierra. De hecho, este será uno de los acercamientos más cercanos desde que hay registro”, indicó David Farnocchia, oficial de navegación de la NASA a la propia agencia aeroespacial.
Es normal que pasar cerca del planeta tierra afecte de una manera relativamente menor el recorrido de estos cuerpos celestes, pero, debido a que este objeto pasó a tan pocos kilómetros de la tierra, finalmente, la órbita que tiene este asteroide alrededor del sol se modificó de una circular a una elipsis, pasando, de solo 359 días para completar una vuelta al sol, a tardar ahora 425 días.