A pocos días de convertirse en la más extendida paralización de la industria de la pesca de toda la historia, la situación se mantiene incambiada, sin que se hayan registrado avances en las conversaciones entre el gobierno y las gremiales del sector.
Como consecuencia de la falta de respuestas a los reclamos de los industriales, 54 barcos de mantienen inactivos al igual que una decena de plantas procesadoras, responsables de las 60.000 toneladas anuales que produce el sector.
En virtud de esta situación, unos 2000 trabajadores permanecen en el seguro de paro, y otros 3000 puestos de trabajo indirectos viven un momento de gran incertidumbre.
Los reclamos coyunturales del sector, que el Poder Ejecutivo no ha atendido de forma satisfactoria, están relacionados con los costos añadidos que el Estado carga sobre la mano de obra, como son el régimen especial de aportación a la seguridad social y el costo del seguro de accidentes laborales, lo cual genera la inviabilidad económica de la pesca industrial.
Contraviento mantuvo una extensa entrevista con el presidente de la gremial de los armadores pesqueros, Ricardo Piñeiro, que puede verse en el siguiente link de nuestro canal de Youtube