Los ministros de Ganadería, Agricultura y Pesca, Fernando Mattos y el de Ambiente, Robert Bouvier recorrieron laguna Garzón, lugar donde por ahora solo se detectaron casos de influenza aviar y en una sola especie: cisnes de cuello negro.
Los jerarcas recorrieron el lugar acompañados por sus equipos técnicos, que realizaron una puesta a punto de la situación sanitaria.
Mattos también destacó el trabajo conjunto entre las instituciones involucradas en el proceso de vigilancia, ya que además de los ministerios de Ganadería y Ambiente, participan el Ministerio de Defensa, las intendencias de Rocha y Maldonado y el Municipio de José Ignacio.
En rueda de prensa Mattos confirmó el deceso de unas 100 aves a causa del virus, todas ellas, pertenecientes a la especie cisne de cuello negro. La cartera mantiene una vigilancia epidemiológica intensiva para monitorear la expansión del virus hacia áreas circundantes.
Mientras tanto Bouvier valoró la celeridad con la que actuó el personal de ambas carteras para detectar el virus de forma temprana.
Ganadería monitorea la situación en las áreas circundantes a la laguna, donde hay aves de traspatio, señaló Mattos. Más de 150 predios fueron recorridos por personal del ministerio, a fin de tomar muestras y constatar muertes de animales. “Hasta ahora no ha habido ningún caso de afectación en las áreas de producción circundantes”, informó.
Asimismo, manifestó tranquilidad y señaló que el problema se delimita por el momento a la zona de laguna Garzón. Se trata de evitar que las aves que puedan estar contaminadas sobrevuelen y propaguen el virus hacia otras regiones. “Es muy difícil de contener y que no tengamos registros en otras áreas, pero estamos con una vigilancia bastante intensiva desde el punto de vista epidemiológico”, indicó.