
Más de dos mil años han pasado desde que Cicerón echara a correr el rumor de que Catilina pretendía destruir e incendiar Roma. Desde entonces las “campañas sucias”, más o menos desembozadas, han sido parte permanente de todo devenir electoral. Se las define como una maniobra táctica que trata de vencer al rival a partir del engaño y la manipulación, a través de instalar mentiras en la agenda pública, en una apuesta a que desmentir una información no tiene la fuerza de contrarrestar el daño causado por el mensaje original.
La penillanura suavemente ondulada
Nuestro país no ha estado ajeno a esos fenómenos a lo largo de su historia. No obstante, como es fácil comprender, en épocas de hiperconectividad y redes sociales el peligro potencial de estas prácticas se eleva en progresión geométrica.
Afortunadamente, el talante nacional no liga mayoritariamente con esas prácticas, por lo que algunos intentos de campaña sucia, importados de otras latitudes, obraron en contra de sus promotores y actuaron en definitiva como alerta para otros eventuales seguidores de ese camino.
Sin embargo, el poder de estas herramientas es muy grande y por ello la tentación a dejarse llevar por ellas es casi irresistible. Así, hace pocos meses vimos instalar una variante propia, local, sobre la cual algún día habrá que escribir en profundidad, la fake news de que hay fake news.
La primera Fake de Autor: Sinaloa esquina Hong Kong
Meses atrás nos despertamos con la noticia de que un por entonces pre candidato presidencial era objeto de una denuncia por agresión sexual, en el marco de un hecho poco claro presuntamente ocurrido diez años atrás.
En rigor, la denuncia parecía “floja de papeles” por lo que ningún operador relevante del sistema político la tomó en serio, y el devenir judicial determinó que se trataba de una total mentira, y sus autoras recibieron el debido reproche penal por ello.
No obstante, no fue la única “fake” que se presentó ante la Justicia.
Por entonces importantes actores políticos y jurídicos plantearon, con gran eco en importantes medios periodísticos nacionales e internacionales, que se habría efectuado un “ataque cibernético”, (si, al estilo Maduro), contra la figura de ese pre candidato, a través de la utilización de miles de cuentas bot en redes sociales, por un valor muy importante, en tanto se afirmaba seriamente que en una sola tarde se habría gastado más que lo que hicieran varios Partidos en toda la campaña de la interna y que el origen de ese ataque se encontraría en Sinaloa, y otras ciudades de México, así como en Hong Kong.
La “campaña sucia” contra Orsi, según su comando:
✔️Dicen que se agitó en redes desde Mexico, más precisamente desde Sinaloa
✔️Después la agitaron desde cuentas creadas en Hong Kong
✔️”Estiman” que se pudo haber gastado entre 30 y 40 mil dólares.
(Voy a seguir)
— Patricia Madrid (@PatriciaJMadrid) March 29, 2024
Este mapa muestra el origen de los miles de trolls que han sustentado la operación política contra Orsi. Los troll centers principales están en Nuevo León y Coahuila, en México. Estos datos son verificables por cualquier profesional que haga « escucha social » y rastree cuentas👇 pic.twitter.com/b6zlXq0rtk
— Luis Costa Bonino (@luiscostabonino) March 16, 2024
No obstante, a pesar de esos informes que todos vimos por los medios y las redes, la situación a nivel judicial fue muy distinta a la anunciada y a pesar de los esfuerzos fiscales no pudo probarse ni una sola de esas afirmaciones y el caso sobre la eventual motivación política y los carísimos ataques desde el exterior fue archivado, en una decisión que nadie recurrió.
Lo que en rigor demuestra la existencia probada y esta vez con autores conocidos de la primera fake news instalada en la campaña, llevada adelante por quienes pretendieron instalar que se habría intentado instalar una fake news contra el candidato denunciado.
Campaña «de dibujitos»
Así las cosas, llegamos a este tramo de la campaña electoral, donde se han criticado mucho por parte de algunos actores cierto tipo de materiales propagandísticos que , en su opinión, “banalizarían” a la actividad política. Inmerso en ese ambiente de repente el autor se vio sorprendido por una pieza publicitaria en Youtube protagonizada por un dibujito animado que representaba al candidato presidencial del Frente Amplio, con la firma «Uruguay Dice». Seguros de estar ante un material profundo y que movería a la reflexión le dedicamos unos segundos de atención, con un exitoso fracaso como resultado. No pudimos entender de si se trataba de algo a favor o en contra.
Ahora bien, la factura profesional de la pieza indicaba que no había surgido de un militante pasado de rosca de un lado u otro, por lo que resolvimos ver quién era el responsable de ese video. En efecto, desde hace ya algún tiempo Google lanzó su Informe de Transparencia de Publicidad Política, que permite conocer las pautas de avisos políticos en su plataforma: quién los contrató, estimar cuánto invirtió y saber cuánto tiempo se mostró esa propaganda y en qué zonas del país.
Para ello se debe acceder a «Acerca del anuncio», con un clic en el ícono de información o en el de 3 puntos.
Así, es posible encontrar a vía de ejemplo a quienes han pautado anuncios en Youtube de la candidatura de Andrés Ojeda, Robert Silva, o Álvaro Delgado, a través de la herramienta de Google Transparencia. En todos esos casos, por cierto, elementos uruguayos de las respectivas campañas.
En el caso que nos ocupa, en cambio, nada podremos encontrar a través del nombre del candidato en cuestión, en tanto los anuncios pautados figuran a nombre de la razón social de varias empresas, todas ellas originarias y radicadas en la vecina orilla, hasta el momento Reputación Digital S.A.S., de Córdoba, así como TEKI SAS y QUARQ S.A.S., ambas de Mendoza.
Tres Tristes Tigres Cruzan el Charco
A través de la visualización de las piezas pautadas por cada una de estas empresas se distinguen marcadas diferencias.
Teki S.A.S. presenta un conjunto de materiales claramente identificados con la lista 609 del Frente Amplio, con una serie de videos testimoniales protagonizados por diferentes personas.

Reputación Digital S.A.S. enfoca sus mensajes centrados fundamentalmente en la figura del candidato Orsi, con filmaciones de actos, y trozos de discursos, el backstage del acto en el Real de San Carlos, así como el jingle institucional, todo sin “firma” visible, pero claramente respondiendo a la figura del candidato.
No sucede lo mismo, en tanto, con los materiales subidos a la plataforma por Quarq S.A.S., donde en los 23 anuncios que fungen relacionados a la campaña de Uruguay podemos asistir a una verdadera exhibición de “campaña sucia”, con materiales que no nos atrevemos a llamar “basura” solo porque la basura siempre encierra alguna utilidad.
Campaña Sucia, «de manual»
Además del ya comentado video animado, encontramos allí una serie de materiales especialmente dedicados a la figura de la candidata a la Vice del Partido Nacional, la que se hace objeto de «anónimos» ataques, al menos para el gran público general, que nadie con un mínimo de dignidad se atrevería a realizar bajo su propio nombre.
«Habladora», podría llamarse una de las piezas, donde con el son de un tema popular se la acusa de hablar y volver y volver a mentir. En el mismo estilo se inscribiría «Mientes».
Con un poco más de estilo y humor se encuentra el video que llamaremos «Campaña», donde se hace una edición sobre la intervenión de la candidata en un programa periodístico para hacerla aparecer como obsesa.
Probablemente la joya de la bajeza esté disponible en el falso documental que denominaremos 2020, donde con una estética, edición y audio muy similar a las de las piezas del oficialismo se tergiversa totalmente el mensaje, para dejar la sensación de que el propio gobierno admitiría un fracaso. Algo muy bajo, que hasta ahora solo habíamos visto en campañas de otras latitudes, para públicos muy rudimentarios.
Naturalmente, Andrés Ojeda también recibe la atención de estos «anónimos» operadores. En un video que podríamos llamar «Desafío» se pretende dejarlo mal parado frente al candidato frenteamplista, haciendo por cierto una acusación directa de corrupción que, por supuesto, no presenta una sola prueba ni hecho. Otro elemento que ningún sector o actor político se atrevería a firmar.
El candidato colorado vuelve a recibir la atención en el video «Descanso», donde se «refrita» un video del propio Ojeda, en un intento de ridiculizarlo cambiándolo de público.
En continuación de la línea infantil, también se ataca a Ojeda en algo difícil de calificar como este material, que al menos es simpático, a diferencia de otros de esta cuenta. Por la misma línea se inscribe lo que llamaremos «Nada», en honor a su mensaje y su utilidad.
Por la misma tónica transcurren los restantes materiales subidos por Quarq S.A.S a Google, en sus diversas plataformas, con contenidos relacionados a la campaña electoral uruguaya. Por supuesto, no se trata de un esfuerzo realizado pro un grupo militante, ni un lobo solitario. Una somera búsqueda nos indica que nos hallamos ante una empresa formal, legalmente constituida y habilitada en la República Argentina, que se desempeña habitualmente en este rubro y en el pasado realizó trabajos para la presidenta del PRO, Patricia Bullrich, así como a otros candidatos argentinos, como Rolando Figueroa, electo gobernador de Neuquén o al diputado radical Miguel Nanni, quien compitiera por la gobernación de Salta por Juntos por el Cambio.
No es bueno nunca hacerse de enemigos…
…que no estén a la altura del conflicto», dice Fito Páez en su genial «Al lado del camino». Más coloquialmente, suele decirse que aquel que vive en casa de vidrio no debe tirar piedras a los vecinos.
Sin embargo, cada uno es libre de elegir los pasos que rijan su proceder, y en rigor no hay nada ilegal en los procedimientos de campaña que ha optado por transitar el Frente Amplio.
No obstante, creemos que es saludable mostrar, en aras de la tan manida transparencia, la real naturaleza y el talante de cada protagonista.
Además, claro, que esperamos que estas contrataciones se reflejen en las Rendiciones de Cuentas que el Frente Amplio deberá presentar ante la Corte Electoral, de acuerdo a la Ley de Financiamiento de Partidos Políticos, así como también esperamos en aras de la recaudación fiscal argentina que las operaciones de exportación de servicios de estas empresas argentinas se realicen en un todo de acuerdo a lo dispuesto por las normas de la DGA y AFIP.